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Tres opciones si no puedes pagar renta: Vivanuncios

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Debido la pandemia del COVID-19, muchas empresas han recurrido a despedir a su personal o reducir los salarios de sus empleados por el cese de actividades para evitar el contagio.

Según datos de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, del 13 de marzo al 6 de abril se perdieron 346 mil 878 empleos en México.

Ante la poca liquidez para pagar la renta de vivienda o departamento, una de las recomendaciones es llegar a un acuerdo con el casero para que elimine cualquier cargo por el retraso de los pagos durante la contingencia. Si es posible, busca asesoría legal para protegerte ante cualquier malentendido con el fin de que ambas partes, tanto el casero como el inquilino, queden satisfechos.

«Hemos recibido mensajes de nuestros usuarios preocupados, por lo que una de las recomendaciones es ponerse en contacto con el casero para negociar un plan de facilidades que permita al inquilino permanecer en la propiedad», indicó Roberto Esses, director general de Vivanuncios.

En respuesta a las inquietudes de los afectados, el portal inmobiliario propone las siguientes alternativas:

Negociar el pago

Antes de comunicarse con el casero, primero se deben evaluar las finanzas del arrendatario y definir con cuánto dinero cuenta para cubrir el pago de la renta. Si su salario fue reducido, o uno de los miembros de su familia aún percibe ingresos, es posible que pueda cubrir un porcentaje de la deuda, sin embargo, si el inquilino se encuentra en una situación de desempleo, probablemente no pueda costear este gasto.

Otro aspecto que se debe tener claro antes de iniciar la negociación es la fecha aproximada en la que la situación laboral del arrendatario se estabilizará, lo cual le permitiría pagar el alquiler.

De acuerdo con la situación económica del arrendatario, existen dos opciones que se pueden ofrecer al arrendador:

  • Disminuir el pago de la renta durante un plazo determinado,
  • Aplazar el pago de la renta durante un plazo determinado.

Diversificar la liquidez

La primera opción, disminuir el monto a pagar, es conveniente ya que el casero seguirá percibiendo un ingreso por la renta de su propiedad y es más probable que sea aceptada por este. Sin embargo, esto requiere que se perciban ingresos o se cuente con ahorros que permitan financiar este gasto.

El segundo caso es ideal si el inquilino se encuentra en una situación de desempleo y no puede pagar la renta, aunque en este caso el arrendador querrá recibir una compensación por aceptar este acuerdo, posiblemente en la forma de intereses.

Es importante que este sea redactado en la forma de un contrato, firmado por ambas partes y que cada miembro del acuerdo conserve una copia. Así cada quien estará protegido legalmente en caso de que se presente un conflicto.

En cuanto a opciones para cubrir el pago de la renta, se recomienda:

 1. Solicitar un adelanto de nómina

Dependiendo de la entidad financiera donde se solicite, algunas de las ventajas del crédito de nómina son autorización inmediata, tasa de intereses baja o nula y que la solicitud se puede realizar vía telefónica, internet o en cajeros automáticos.

Se puede solicitar que el banco otorgue una suma de dinero equivalente al total o a un porcentaje de la nómina que el cliente cobra, con la ventaja de que este puede ser pagado a plazos o completamente, cuando se cuenten con los recursos suficientes.

2. Tramitar un préstamo bancario

Aunque no es recomendable adquirir una deuda durante una situación económica inestable, solicitar un préstamo bancario es una buena opción si la prioridad es cubrir el pago de la renta y contar con un espacio donde resguardarse durante la contingencia.

Las entidades financieras ofrecen préstamos personales, los cuales sirven para cubrir gastos en emergencias como la pérdida de empleo. Estos préstamos se tramitan de manera rápida, aunque muchas veces requieren de preautorización.

Los requisitos para tramitarlo varían de entidad en entidad, pero generalmente son:

  • Ser mayor de edad y menor de 75 años.
  • Ser cliente de la entidad financiera.
  • Contar con un buen historial crediticio y una buena reputación en el buró de crédito.
  • Contar con comprobantes de ingresos como recibos de nómina o estados de cuenta de la entidad financiera.

Además de utilizarlos para pagar la renta pueden utilizarse para invertir en un pequeño negocio, cubrir gastos médicos, financiar futuros eventos y saldar deudas.

Las opciones que algunas instituciones bancarias ofrecen para pagar dichos créditos son:

  • Mensualidades fijas.
  • Plazos de hasta 60 mensualidades.
  • Posibilidad de adelantar pagos.
  • Tasa de interés fija.

3. Rentar una propiedad más económica

En caso de no llegar a un acuerdo y no contar con un financiamiento para el pago de la renta, es posible que se deba concluir el contrato de renta de la propiedad y buscar una vivienda cuya renta sea más económica.

Una forma de sobrellevar el impacto a los ingresos de un inquilino es mudarse a una vivienda compartida, ya que el costo de una habitación suele ser menor y los gastos de servicios públicos como agua y luz son divididos entre más personas.

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