Prevé Cepal caída de 9% del PIB al cierre del año de la pandemia

Por Julián Sánchez

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) prevé que este año el Producto Interno Bruto (PIB) de México caerá  9%; es decir superior al 0.1% que registró en 2019, lo que representaría la mayor contracción de la actividad económica del país desde 1932.

En su edición 2020 del Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe, la Cepal examina el comportamiento de las economías de la región durante el año, y actualiza las cifras de crecimiento y otros indicadores que reflejan el impacto sufrido por los países de la región a raíz de la crisis del COVID-19.

Presenta nuevas estimaciones del PIB para la región y todos sus países en 2020 y entrega una primera estimación de crecimiento para 2021. Además analiza los efectos económicos provocados por la pandemia en cada país a la luz de los acontecimientos de los últimos meses, y brinda recomendaciones de políticas para enfrentarlos, sobre todo en materia fiscal y monetaria, junto con resaltar la importancia de cooperación internacional.

En el caso de México, prevé que para 2021 el PIB de México aumentará un 3.8%, debido, principalmente, a una recuperación gradual de la actividad económica. “Una lenta disponibilidad de una vacuna contra el COVID-19 podría propiciar una disminución del PIB. La inflación se ubicaría en alrededor de un 3.% y la tasa de desempleo en alrededor de un 4.8%.

“Con ello, el déficit fiscal del sector público no financiero llegaría a representar alrededor del 2.9% del PIB (con un balance primario de un 0.0% del PIB) y el déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos equivaldría a un 1,0% del PIB.

La Cepal resalta que la reducción de la demanda y la oferta interna se sumaría a la caída de la actividad económica mundial, en particular a la de Estados Unidos.

Con ello, la inflación en 2020 se ubicaría en un 3.5% y la tasa de desempleo en un 5.1%. El déficit fiscal del sector público no financiero representaría el 2.9% del PIB, lo que supone abandonar la meta prevista de lograr un superávit primario del 0.7%  del PIB y pasar a uno del 0.1% del PIB, en tanto que la cuenta corriente de la balanza de pagos tendría un superávit equivalente a un 1,5% del PIB.

Recordó que el pasado 30 de marzo, el Consejo de Salubridad General declaró la emergencia sanitaria en México y el 21 de abril, la Secretaría de Salud declaró el inicio de la fase 3 de la respuesta ante la enfermedad por Covid-19, decretó el cierre temporal de parques, estadios, bares, playas y templos, y limitó la movilidad. Para contrarrestar el impacto negativo de la crisis sanitaria.

El gobierno puso en marcha diversos instrumentos en materia económica y social. Los apoyos fiscales han sido equivalentes a un 1.1% del PIB y se han financiado con la reorientación de recursos fiscales y sin contratar deuda adicional a la programada, entre otras acciones.